Cómo nos conectamos con nuestro Yo Superior

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Los Soles: 

Recuerdo cuando mi hijo Mati aprendió a hacer sus garabatos, lo primero que dibujó fueron soles. Y allí en donde creaba un cielo, en todos y cada uno, siempre había dos soles.

Así desde los 2 años hasta hoy que tiene 10, cada vez que dibuja un cielo, sigue dibujando con seguridad 2 soles presentes. Es lo que él conoce y de hecho, para mí fue una confirmación más sobre los conocimientos que por mi parte, sintonizaba desde mi infancia. 
Mati siguió expresándose con libertad sin ser coartado ni por nosotros sus padres ni por sus maestros, porque lo que ellos traen es su sabiduría innata, su recuerdo inconsciente de las vivencias de su ser cósmico y su viaje por el centro de la galaxia, justamente de dónde proviene el origen del alma de Mati. 
Crucial para ellos no coartarlos y dejar que se expresen con libertad, para que puedan pasar a la mente consciente los recuerdos de sus vidas pasadas, en este o en otros planetas, y promover así el autoconocimiento de su ser, ayudando, entre otras cosas, a comprender su misión de vida en la encarnación presente.

"Tarjeta de cumpleaños para Eva", Mati DBH, 5 años.
"Casitas para los pájaros", Mati DBH, 7 años.

Mensaje actual sobre los Soles:

Actualmente, el 8 de agosto de 2021, nuestro sol se alineó al sol de Sirio durante el portal del León el 8/8, abriéndose así un conducto entre los dos soles, para que se transmita desde Sirio el pulsar de la luz del espíritu del Creador Padre-Madre de nuestro universo local.
Cómo les conté en otras ocasiones, los Soles pulsan. Tienen configurado el mismo pulsar de la Luz del Espíritu del nuestro creador universal, Nebadón-Nebadonia, creador del universo al que pertenecemos.
Por eso los soles: 
• Sol Central de la Galaxia, 
• Sol del sistema estelar de Sirio (y los soles de otros sistemas solares planetarios de la Galaxia), 
• Sol de nuestro sistema solar planetario (Monmatia*), 
funcionan, como antenas receptoras y transmisoras desde la Fuente central Nebadón, además de ser “sedes administrativas”.
Entonces el Sol Central de la Galaxia contiene la frecuencia de la luz del espíritu en forma directa desde la Fuente, se le configuró el mismo Pulsar que la Fuente Nebadón,  para que al re-transmitirse esa frecuencia a través del sol de Sirio, llegara hasta Monmatia (a nuestro sol), para ser introducida en nuestro Planeta Tierra (Urantia*). 
Así llegaría hasta los humanos que al momento logren tener bien calibrados sus cuerpos, purificados y alineados para poder recibir las frecuencias del sol, a través de los fotones solares que portan los códigos de Luz, (información del Universo) para ser asimilados por nuestro ADN y activar “la maquinaria” que poseemos desde siempre sin usar, pero ha llegado el momento cósmico de ser puesta en marcha, para la transformación y evolución de la raza humana crística kadistu 33, de la que formamos parte.
Así es como el humano alínea su latir, el pulsar de su corazón, el diastole-sístole al pulsar del creador. Nuestro Sol Monmatia al quedar alineado con el sol de Sirio, enlaza y re-transmite ese pulsar a nuestra Llama Trina, nuestro Chakra Corazón y nuestro Chakra Timo.
Nuestro corazón pasaría a ser activado como un sol, latiendo en sincronía con los soles de la Galaxia, pulsando la frecuencia de la Luz del Espíritu. en concordancia con la Fuente en donde está el Creador, ¿Para qué? Para que todos aquellos seres que aún no lo han hecho, puedan conectarse a su Yo Superior. 

* Monmatia: es el nombre por el que se conoce a nuestro sistema solar, en el Universo, dentro de la “administación” por llamarlo de alguna manea, del Universo de nuestro Creador: Nebadón. 
A la vez, este Universo al cual pertenecemos es llamado Nebadón también, como su creador. Sin embargo, “Nebadón ” no es un nombre, sino un cargo, el cargo de creador de este universo. Nebadón significa “Explandôn”, en palabras humanas, algo así como “expansión total de la Luz del Espiritu”.
* Urantia: es el nombre que recibe el Planeta Tierra, digamos, fuera de la Tierra. Es decir, es llamada así en el resto del Universo.

En Amor y Unidad,
Cecilia Harrison
12.08.21
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