by Luz, frecuencia y color, sonido, geometría y números.
Autora: Cecilia Harrison
Autora: Cecilia Harrison
Todo es energía y todo es conciencia. Cada alma dentro de esta realidad es una frecuencia de esta conciencia y una expresión de esta frecuencia. “Como es arriba es abajo” y así continúa hasta el infinito.
Todo lo creado ES, en su aspecto morfológico, a partir de lo que llamamos Geometría Sagrada y los números. A través de la Geometría Sagrada y los números, se crea la “forma” a todo lo que existe.
Y a la vez, todo lo creado ES, en su aspecto esencial, a través de la Luz del Espíritu de nuestro padre-madre creador, el soplo vital que da origen a cada ser vivo. Lo que llamamos la Conciencia Una.
Energía y materia
Energía y materia son parte de lo mismo. Partiendo de que como seres, somos luz: energía vibrando en diferentes frecuencias, la energía que existe en el Universo como antimateria, al entrar dentro de un rango de frecuencia vibratoria determinado, ingresa al universo de bariores, en donde se transforma en materia. La Luz del Espíritu o Conciencia Una, pasa por un proceso de fractalización y bajada de frecuencia, necesarios para encarnar en las dimensiones más densas de la materia.
Así como seres ålmicos que somos, réplicas del creador, encarnamos en cuerpos de materia densa, lo cual nos posibilita continuar nuestro viaje experimental, desde las dimensiones más sutiles a las más densas y desde allí de regreso a la fuente creadora de origen.
Viviendo como humanos, según la frecuencia que creamos, más o menos densa, será la realidad que manifestamos, y atraemos. Por eso se dice “somos lo que vibramos.” Porque somos creadores de nuestro propio mundo, somos co-creadores al igual que nuestro padre-madre creador.
Frecuencia, color y sonido
Los 7 colores del arco iris que percibe el ojo humano, en realidad son frecuencias de luz (información del Universo, también llamada: prana, chi, energía vital). Es decir, energía vibrando a distintas frecuencias, según de que color se trate.
Hasta ahora, ha sido la forma en que el humano ha podido percibir visualmente las frecuencias vibracionales, a través del color.
En el rango auditivo, en cambio, las frecuencias son percibidas a través de las ondas del sonido.
Normalmente el oído humano puede percibir entre 20 hz y 20.000 hz. (Hz=Hertzios. 1hz = un ciclo u onda por segundo).
Cada una de las 7 notas de la escala musical vibra en una frecuencia única, y según su tono, ya sea agudo o grave, será una frecuencia alta o baja, respectivamente.
Ya habrán observado que ésta correspondencia se repite:
- los 7 colores del arcoiris,
- las 7 notas musicales,
- los 7 rayos a los que pertenecen los seres y guías de luz que nos asisten (maestros ascendidos, ángeles y arcángeles, elohims),
- los 7 chakras principales del cuerpo humano y del cuerpo planetario de Gaia,
- los 7 días de la semana,
- los planetas de nuestro sistema solar, etc.
Es sabido que no es pura casualidad, sino que ha sido perfectamente diseñado por nuestro Padre-Madre Creador del Universo, del cual somos parte. Todo es perfecto. Todo está creado bajo plan. El Plan Divino.
La frecuencia de Gaia
Es primordial saber, que la frecuencia vibracional armónica natural de la Tierra y el cosmos es 432 Hz, correspondiéndose con el Chakra Ajna – Tercer Ojo (humano-planeta). Es la frecuencia a la que nos conviene acoplarnos para estar en sintonía armónica con el planeta y el universo. A diferencia de la actual de 440 hz que fue introducida el siglo pasado, con otros fines e intereses, contrarios al bien común.
Esto significa por ejemplo, que los sonidos y la música que producimos y escuchamos, los instrumentos musicales que usamos para crearla, están calibrados por concenso, en la frecuencia de 440 hz, lo cual está en desarmonía con la naturaleza de Gaia y el Cosmos.
Por eso, si intervenimos conscientemente en nuestra realidad, podemos empezar a calibrar a 432 hz si somos músicos o escuchar música en frecuencia 432hz, buscando en la red, ya que cada vez somos más los que estamos cambiando nuestra propia realidad y la de Gaia por una mejor, el mundo en el que deseamos vivir.
30.09.2021
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Estas palabras son sólo un granito de arena compartido. Si te llegaron y resonaron es porque vibramos juntos en el infinito y la magia de la sincronicidad existe.
Pero las repuestas que buscas, todas están en tu interior. No busques respuestas afuera. Reconecta con tu Ser interno, escucha sus mensajes, sigue su guía.
El conocimiento sólo se convierte en sabiduría al ser vivenciado, discernido, corroborado y aprehendido en tu propia vida.
La única brújula que nos guía es nuestro propio corazón.
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Cecilia Harrison
